miércoles, agosto 24, 2005

algo que tenía que ver con los fractales y degeneró en descarga

-"tenés un programa?"
-"... Mmmm. No, es que, ya está terminando agosto y... no"
- "..."
Siento que he vivido con esa sensación toda mi vida.
El primer recuerdo que tengo de ella es de la época en que tenía unos ocho años: mis viejos me habían llevado a ver Holiday On Ice (!) y recuerdo estar sentada (cagada de frío) en la platea teniendo la amarga revelación de que ya era demasiado tarde para ser una de esas nenititas patinadoras en minúsculos tutús que bailaban con el ratón gigante de galera.
A los trece o catorce años, inexplicablemente, sentí algo muy parecido asociado al hecho de que ya nunca podría ser una pequeña ajedrecista prodigio (recuerdo incluso pensar que ya era demasiado tarde para aprender ajedrez (?) ).
Lo del ballet todavía lo estoy procesando.
Y así.

Pero por el contrario, desde que tuve mis primeros problemas con los plazos de entrega, en la primaria, (es decir, desde que tuve plazos de entrega) que tengo la no-tan-secreta convicción de que el tiempo es exprimible hasta el último nanosegundo. Es decir, que es infinitamente divisible; y que si yo contaba con sólo quince minutos más para contestar los últimos dos tercios del examen, lo único que necesitaba era lograr, mediante un artilugio que-tan-difícil-no-debía-ser, que mi cerebro operara como si un segundo fuera un minuto, o un minuto una hora, y etcétera. El "eternity in an hour" desde el más intuitivo y mundano punto de vista de una nena de doce años. Una mezcla de Borges, la paradoja de Zenón, el tiempo como fractal y el más enfermo voluntarismo. Y sin embargo no puedo evitar angustairme ante la sensación de que agosto ya se termina.

miércoles, agosto 10, 2005

Bifurcato.

Suelen venir de a dos. Y tiene que ser una, pero nunca puede ser sólo una al final. Es un caso de dialéctica, diría mi abuelo marxista. Es un claro ejemplo de figura y fondo, diría mi madre gestáltica. Es porque sos de Géminis, diría Aschira. Es que sos un quilombo, diría mi hermana. Pero es que me vienen de a dos. Aunque no realmente.

It was just one of those things
Just one of those crazy flings
One of those bells that now and then rings
Just one of those things
It was just one of those nights
Just one of those fabulous flights
A trip to the moon on gossamer wings
Just one of those things

If we'd thought a bit before the end of it
When we started painting the town
We'd have been aware that our love affair
Was too hot not to cool down

So good-bye, dear, and amen
Here's hoping we meet now and then
It was great fun
But it was just one of those things
*

Caro mio ben
credimi al men,
senza di te
languisce il cor.

Il tuo fedel
sospira ognor,
Ceza crudel
tanto rigor.

Ceza crudel
tanto rigor!

Caro mio ben
credimi al men
senza di te
languisce il cor.
(*)

viernes, agosto 05, 2005

Grandes Cosas que pueden pasar en un Pequeño Viernes ((porque nunca habrá llegado el día en que se hayan posteado demasiadas de estas tonterías))

- que redepente y sin darte cuenta, le hayas ganado un agujero más al cinturón.
- ver a una pareja de japoneses viejitos en la puerta de ese negocio que creías abandonado, y encontrarte con que, parados así juntos, se ven muy tiernos.
- cruzar la calle en el momento exacto en que se estaban prendiendo los faroles.
- descubrir que tenés una impresionante capacidad para enojarte y gritar y que no se siente nada mal, de vez en cuando.
- encontrarte a tu hermana en el supermercado, en el preciso instante en que empezabas a preocuparte por cómo ibas a hacer para llevar las bolsas vos sola.
- cambiar unas palabras con él.
- que te salude por la calle una persona a la que ni soportabas ni conocías demasiado, y que, misteriosamente, te inspire genuina simpatía.
- que tu papá te traiga masitas de chocolate.
- morirte de frío. y acto seguido escarmentar viendo cómo una pobre señora le está pasando un trapo al patio.