martes, octubre 18, 2005

Burbujas de jabón.

En lo que a consumo de TV y películas se refiere, suelo ser bastante principista. Después de haber gastado años de preciosa infancia y adolescencia viendo repeticiones de películas espantosas y series mejicanas, tengo mis exquisiteces. Tanto de contenido como de administración del tiempo (por ejemplo, cuando puedo evito ver los primeros 20 o 30 minutos de las películas que miro en casa, porque en la mayoría de los casos son insípidos y bastante prescindibles para entender la trama; si la peli está muy buena los veo después). Ni hablar de prender la tele al medio día: esos programas de chismes inventados y cuerpos desnudos están diseñados para retener la atención cuando no hay nada que decir ni nada que mostrar. Ni hablar de prender la tele en general, bah.
Mi vieja, sin embargo, tiene la tendencia a llevarme por malos caminos en estas cosas. Es así que, por ejemplo, puedo decir sin miedo a exagerar que he visto Tienes un e-mail unas treinta o treinticinco veces. No me sobreestimen: la considero una muy buena película, pero es un antecedente que ofende mis ambiciones de eficiencia y disciplina. Uno sabe que la vio demasiadas veces cuando se sabe los diálogos de memoria.

"Franco!??! She had an affair with Generalísimo Franco!??!? (...) I can't believe it!
"It was in Europe, people do stupid things when they are in foreign countries
"Yeah, they buy leather jackets for much more than they're worth, they don't fall in love with Spanish dictators!"

La cita viene a cuento de q, estando de viaje, (y le hecho la culpa a mi matre) me vine a enganchar con la novela de Laport. Sí, esa. Y, vergüenza aparte, hemos llegado a algunas conclusiones:

* Como se ha dicho en reiterados medios y ocasiones, el de Lapor' es, definitivamente, el trasero más televisado de la Historia argentina. Qué cosa, ese hombre, que encuentra excusa para sacarse las ropas en cada episodio.

* El tiempo estimado para entender la historia de la telenovela en cuestión es de unos cuatro o cinco siete u ocho días, seis para los espectadores más avezados, diez si ud es hombre. Otros dos para terminar de aprenderse los nombres. Qué quilombo.

* Después de tanto esfuerzo uno simplemente no puede dejar de verla así como así: sería una lástima.

* La frase "Los tuyos,los míos y los nuestros", aplicada aquí, sería como querer representar en tres dimensiones una función en ocho.

* Los personajes de dicha historia claramente no están considerados en las estadísticas que muestran que la población de Buenos Aires casi no crecerá. Qué manía de tener hijos, loco.

* El "horario de protección al menor", (a) es un eufemismo de los malos, (b) es una estrategia de marketing, o (c) realmente quiere decir "padres protejan a sus hijos de la TV en este horario"